Santa Dimmesdale no es un lugar normal. No es un buen sitio, sobre todo para los niños. En esta ciudad se conjugan las sombras.
Uno de septiembre. Algunos vuelven hoy a Hogwarts y yo escribo mis novelas de terror y fantasía. Quizás existe una correlación. No lo sé.
Después de tantos meses, El Tiempo del Príncipe Pálido ya está a la venta en formato digital en Amazon. En octubre estará en físico también ese gran portal y en diversas librerías. Un pasito más y, sin pretenderlo, con las fechas adecuadas, cuando se acerca otoño, los monstruos escapan, leemos a Bradbury y Halloween se convierte en un todo muy oportuno.
El Tiempo del Príncipe Pálido es una historia con la que he aprendido mucho y me lo he pasado francamente bien a la hora de escribirla. No quiero ir de simpático por la vida, pero podría llegar a afirmar que con esta novela he podido utilizar todo lo que he aprendido de las anteriores y la siento como un paso más. Siempre deseé concebir una pequeña aventura que tratase sobre la amistad, los miedos, la vejez, la muerte, los monstruos, los años ochenta y este es el resultado.
Esta fantasmagoría, que me devuelva al terror y la fantasía, expande un poco más el multiverso de la Saga Devon Crawford. No hay que leer Devon Crawford y los Guardianes del Infinito para disfrutar de El Tiempo del Príncipe Pálido, por cierto. No obstante, añade personajes, eventos y multitud de cosas que considero interesantes para la saga.
Muchísimas gracias a todas las personas que han hecho posible esta novela y a todas las que la lean a partir de ahora.
Aguardo que os guste mucho esta nueva historia y que os acompañe en vuestros sueños o pesadillas, porque el Príncipe Pálido lleva mucho tiempo esperando escapar de su maldición e ir a por vosotros...