“Puedes pasar el resto de tu vida conmigo, pero yo no puedo hacer lo mismo contigo. Tengo que seguir viviendo. Solo. Es la maldición de los Señores del Tiempo”.
DÉCIMO DOCTOR a ROSE
Es un personaje bastante excéntrico y un símbolo para Inglaterra. A veces joven, a veces mayor, pero siempre un genio brillante y, la mayoría de las veces, con poca humildad, pero muchísimo corazón (dos, para ser exactos). Cuando está a punto de morir, es capaz de regenerar su aspecto y con él cambia parte de su personalidad. No sé si es relevante, pero, por cierto: es un extraterrestre (supuestamente, mitad humano por parte materna). ¿De quién estoy hablando? ¿No lo sabéis? ¡Del Doctor! ¿Quién? ¿No lo sabéis? Pues sí seguís leyéndolo, conoceréis más del personaje creado por Sydney Newoman, C. E. Webber y Donald Wilson y alimentado por las historias de otros geniales guionistas para la BBC.
El Doctor es un Señor del Tiempo, unos alienígenas del planeta Gallifrey capaces de dominar, entre otra casas: el pasado, el presente y el futuro. Durante años se ha enfrentado a terribles enemigos como los daleks (con su eterno: “Exterminar”) o los Cyberman (unos monstruos mecánicos). Ah, y tiene transporte propio: su nave, la TARDIS[1], tiene el aspecto de una caseta de policía de los años 50 y, cuando aparece, lo hace con un sonido especial que todos los fans reconocen (que, realmente, es el sonido de unas llaves deslizándose por las cuerdas de un piano). Eso sí, por dentro, la TARDIS tiene un aspecto mucho mayor y más fascinante que el exterior. Más que una simple nave, es un ser vivo que incluso tiene alma y por el que llegas a sentir y padecer por lo que pueda ocurrirse (véase el desenlace de la trama de Lobo Malo o el encuentro del Doctor con el demonio- sí, sí, ¡con la idea del demonio!).
En total, el Doctor ha contado con once encarnaciones, por orden: William Hartnell, Patrick Troghton, Jon Pertwee, Tom Baker, Peter Davison, Colin Baker, Sylvester McCoy, Paul McGann, Christopher Eccleston, David Tennant y actualmente Matt Smith. No obstante, también ha tenido películas y especiales con otros rostros como el excelente Peter Cushing (uno de los grandes actores de la Hammer que pasó a la Historia por su papel de Van Helsing y aparece también en "Star Wars: Una Nueva esperanza" como Gran Moff Tarkin), Rowan Atkinson (más conocido como Mr. Bean) y Hugh Grant (actor que no necesita presentación). Todos ellos han sabido aprovechar a un personaje ansiado por cualquier actor sensato.
El Doctor es un tipo todopoderoso, no sólo por su inteligencia o por su manera de ser, sino también porque ha acabado siendo un pacifista que esgrime, como única "arma", un destornillador sónico (bastante útil... Cof...quierounopormicumpleaños...cof).
A lo largo de su historia, el Doctor, condenado a vivir toda la eternidad, ha contado con varios acompañantes. Como dice el Décimo Doctor: “Puedes vivir toda tu vida conmigo, pero yo no puedo vivir toda la mía contigo”, condenado a ser casi inmortal, el Doctor ha visto a grandes compañeros que han seguido las aventuras del héroe. ¿Quién no querría ir de aventuras con este gran héroe?
Además de ser una institución para todo el público inglés y haber recibido varios premios, también lo es no sólo por sus aventuras, sino también por los especiales que se han hecho para recaudar dinero para las personas más necesitadas. Sin duda, si algo tiene el Doctor es corazón (recordad: dos).
La serie lleva desde 1963 fascinando a docenas de generaciones, convirtiéndose en un programa para toda la familia, pero que, por ello, no es sinónimo de infantil y estúpido, sino de gran entretenimiento y grandes aventuras, algunas muy inteligentes. La revisión de muchos conceptos de la serie a partir de la nueva versión de 2005 es algo que me encanta (y envidio) como espectador y como escritor. Esta habilidad para tomar lo antiguo y hacerlo nuevo y fascinante, es lo que hace de autores como Alan Moore, ser uno de los grandes (por cierto, escribió algunos tebeos del Doctor ). Con la teleserie, veo que es una habilidad que tienen algunos grandes escritores como Steven Moffat o Russel T. Davies, que resucitaron esta serie.
Cada capítulo tiene ideas estupendas (los "fantasmas" que reviven a los muertos), estupendas (la reaparición de una antigua compañera del Doctor), momentos cómicos (el Doctor bailando), trágicos (como la regeneración del Doctor, por ejemplo la del Noveno al Décimo), guiños (hay referencias a elementos de otras épocas de la serie: como el perro robot K-9, además de a películas- el discurso de "El Rey León" que suelta sin querer el Doctor-; además de a lugares, el planeta Barcelona), épicos (el enfrentamiento contra los Daleks), reflexivos (como la aparición del "último" Dalek)… Y es una serie que, quieras o no, termina enganchándote y acabas sabiendo que el tema de música que inicia las canciones se transforma para ti en sinónimo de aventuras.
Decir también que ha tenido varios spin-off como la serie Torchwood (con el carismático Jack Harness), Las aventuras de Sarah Janes (protagonizada por una antigua compañera del Doctor) además de una serie de dibujos animados, entre otras aventuras como novelas, historietas y videojuegos que no hacen más que acrecentar las aventuras de este gran personaje.
Como defiende el escritor Rafael Marín en su bitácora, es una pena que en España no hayamos vivido las aventuras del Doctor Who en su momento. El mundo de lo fantástico, no cabe duda, que estaría mucho más reconocido en nuestro país.
Ojalá tuviéramos a la TARDIS para cambiarlo.
“Has sido fantástica y ¿sabes qué? Yo también”
NOVENO DOCTOR a ROSE TYLER.
[1] Time And Relative Dimension In Space.
