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| La sombra de los Greyjoy es alargada en este capítulo. Sus tentáculos se extienden... Fuente. |
"Tomaremos los Siete Reinos sin convertirlo todo en un baño de sangre"- Tyrion.
Stormborn: homenaje al título de Daenerys y nombre del segundo capítulo de la séptima temporada de Juego de Tronos, que comienza a asemejarse a un final de muchos capítulos donde las diferentes tramas abiertas se aproximan a su último choque.
Si la sexta temporada y el primer capítulo de la séptima nos hacían pensar que Daenerys lo tenía fácil, básicamente este episodio viene a decirnos que no, que sus aliados no lo son por fervor a ella y que la amenaza de Desembarco del Rey sigue ahí. Por mucho que cuenten con una posible alianza con Jon Snow, es un grupo que no está unido ¿y cuál sería el precio para ellos tras ganar el conflicto? ¿Guerras civiles? ¿Traiciones?
Además, si muchos pensaban ya que los Lannister habían sido vencidos, demuestran que siguen teniendo un as en la manga (o en las catacumbas) en cuanto a la guerra contra los dragones y el contraataque de sus numerosos enemigos. Cersei es una déspota, pero es poderosa, tiene a Qyburn y sabe jugar sus cartas, mientras cuente con Jaime como aliado y continúe manejando cada una de las tramas de los Siete Reinos.
Mientras, en Antigua, Sam procura convertirse en maestre, aunque sea desafiando a sus mentores e intentando curar a Jorah. Ambos pueden ser la llave de muchos eventos que ocurrirán a continuación, ya sea para la Madre de Dragones o para el Rey en el Norte, sin descontar el descubrimiento del vidriagón o los posibles pasos de cada personaje.
Y es que en el Norte, la situación tampoco es sencilla, porque Jon está dispuesto a aceptar la invitación de Daenerys, aunque Sansa esté cayendo bajo el influjo de Meñique, ese personaje que no duda en mentir ante la tumba de Ned Stark. Las Casas del Norte no son partidarias de jurar pleitesía a la reina, pero Jon necesita aliados y el vidriagón para enfrentarse a los muertos.
Otra Stark que se halla dividida es Arya, que se reencuentra con dos viejos amigos en este capítulo, aliados que la hacen dudar sobre quién es ella y qué debe hacer. ¿Volver a casa? ¿O destruir a la reina? ¿Puede ser una aliada dentro de los muros de Desembarco del Rey? Arya es un personaje fuerte, pero no deja de ser una niña destrozada que ha tenido que crecer muy rápido.
Por último, tenemos una batalla naval entre sombras y centellas, y sí, es cuando menos lo esperamos. El pirata Euron Greyjoy ataca a sus sobrinos y sus aliados en una cruenta lucha que se resuelve con una terrible matanza. Y es que el regalo de Euron para Cersei parece que serán las cabezas de los enemigos de la reina y, ciertamente, cuando todo parecía que se iba a arreglar, una vez más la serie quiere hacer sufrir al espectador y, por supuesto, a sus personajes.
Para concluir, Stormborn ha sido un capítulo de ir reuniendo piezas y situándolas en el tablero. Su ritmo no es terriblemente endiablado y sus interpretaciones siguen el guion, pero Juego de Tronos continúa siendo una de las mejores series del momento.
En conclusión, no, la toma de los Siete Reinos no será sencilla y, mientras, Más Allá del Muro, los muertos sonríen. Y caminan...
