
Cuando Joe Strombel
(genial Ian McShane) la palma, no se podía imaginar que descubría una noticia
que podría haberle encumbrado. El periodista decide escapar de la barcaza de la
muerte y llegar hasta una chica que estudia periodismo, la ingenua y algo
tontina Sandra Pranksy (Scarlett Johansson), para que ella investigue y
descubra la verdad tras un asesino en serie que podría ser un millonetis Peter
Lyman (interpretado por un buen Hugh Jackman[1]). Por el
camino nos encontramos con Sid Waterman, encarnado por un propio Allen que hace
gala de su eterna y magistral verborrea a la vez que mantiene una relación
llena de química con Johansson durante toda la película.
Nos encontramos en
Scoop
con un misterio interesante mezclado con una tragicomedia divertida. El
espectador intenta responder, desvelar, resolver el misterio como ocurre con
las historias de suspenses o los trucos de magia (genial comparación de Allen)…
aunque el director haga aquí también de mago y decida hacer alguna que otra
trampa… pero se disfruta por el humor (bastante negro o ácido).
Todo esto aparece
alrededor de una trama que es mero entretenimiento, con un desenlace algo
simple y del que tampoco se puede pedir el drama que acompañaba Match
Point. Al menos disfrutamos de Londres con la sabiduría de ese Allen
que desde hace años hace viajes por todo el mundo para regalar historias sobre
cada una de las ciudades que le gustan.
Estamos por tanto
ante un Woody Allen juguetón, que bromea sobre la muerte, la vida, el
periodismo, la magia, los asesinos en serie y que nos regala alguna de sus
grandes citas – que se queda él- (“Ese
hombre es un mentiroso y un asesino, lo digo desde todo el respeto”) y
sátiras durante todo el metraje lo que ya hace de por sí que Scoop
sea disfrutable, aunque no una de sus obras maestras.
Así que ya saben,
vean Scoop,
son ustedes seres extraordinarios, ejemplos para su raza. Y cuando la vean,
entenderán estas palabras.
P.D.: Un ejemplo de trampa de
Allen: ¿por qué sospechaba la secretaria del personaje encarnado por Jackman si
este no era el asesino original y el auténtico asesinato lo cometía tiempo
después? ¡Da igual! La película distrae con sus virtudes.
[1]
Irónicamente, Jackman y Johansson también aparecerían en El truco final, donde
la magia tiene mucho que ver.